Salmos 138:1-2 La Biblia de las Américas (LBLA)

 

 

Acción de gracias por el favor del Señor

 

 

 

Salmo de David.

138 Con todo mi corazón te daré gracias;
en presencia de los dioses te cantaré alabanzas.
Me postraré hacia tu santo templo,
y daré gracias a tu nombre por tu misericordia y tu fidelidad[a];
porque has engrandecido tu palabra[b] conforme a[c] todo tu nombre.
En el día que invoqué, me respondiste;
me hiciste valiente con fortaleza en mi alma.

Todos los reyes de la tierra te alabarán[d]Señor,
cuando hayan oído los dichos de tu boca.
Y cantarán de los caminos del Señor,
porque grande es la gloria del Señor.
Porque el Señor es excelso,
y atiende al humilde,
mas al altivo conoce de lejos.

Aunque yo ande en medio de la angustia, tú me vivificarás[e];
extenderás tu mano contra la ira de mis enemigos,
y tu diestra me salvará.
El Señor cumplirá su propósito en mí;
eterna, oh Señor, es tu misericordia;
no abandones las obras de tus manos.

 

 

 

 

 

Un Encuentro Con la Palabra

 

 

Promesas – Confía hoy en Dios para que haga todas tus peleas

Muchas personas dicen que tenemos  que pelear nuestras
propias batallas, pero la Palabra de Dios dice que el Señor peleará por nosotros.
Confía hoy en Dios para que haga todas tus peleas.

La Humildad puede hablar por ti.

Gálatas 5:22-23
El fruto del Espíritu es… humildad.

Eclesiastés 7:8
Mejor es el fin de un asunto que su comienzo; mejor es la paciencia de espíritu que la altivez de espíritu.

Jeremías 33:6
he aquí, yo le traeré salud y sanidad; los sanaré y les revelaré abundancia de paz y de verdad.

Mateo 7:16
Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos o higos de los abrojos?

Romanos 5:1
Por tanto, habiendo sido justificados por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo,

Romanos 8:5
Porque los que viven conforme a la carne, ponen la mente en las cosas de la carne, pero los que viven conforme al Espíritu, en las cosas del Espíritu.

1 Corintios 13:4
El amor es paciente, es bondadoso; el amor no tiene envidia; el amor no es jactancioso, no es arrogante;

Efesios 5:9
(porque el fruto de la luz consiste en toda bondad, justicia y verdad),

Colosenses 3:12
Entonces, como escogidos de Dios, santos y amados, revestíos de tierna compasión, bondad, humildad, mansedumbre y paciencia;

1 Tesalonicenses 1:6
Y vosotros vinisteis a ser imitadores de nosotros y del Señor, habiendo recibido la palabra, en medio de mucha tribulación, con el gozo del Espíritu Santo,

 

 

 

 

Un Encuentro Con la Palabra

 

 

DESANIMO ESPIRITUAL


Devocionales, Reflexión



Experimentamos el desanimo muchas veces a lo largo de nuestra vida. La falta de energía, vitalidad o interés en ciertas áreas, algunas veces provocadas por cansancio físico y otras por motivos emocionales son las principales causas, pero dentro del desanimo esta también el que experimentamos en el área espiritual, ese raro sentimiento como de falta de energía para seguir adelante con lo que estas haciendo, como que a veces quieres pero algo te desanima, no son problemas, y a veces ni siquiera es algo que puedas explicar, pero sientes que aunque quieres hacer algo, por algún motivo terminas desistiendo.


El desanimo tanto en lo natural como en lo espiritual produce un sentimiento de incomodidad que aunque no deseamos sentir esta presente, quieres hacer algo y te dispones a hacerlo, pero de un momento a otro te encuentras otra vez sentado en el mismo lugar que estabas, se te pasa el tiempo realmente en nada, sientes como si te secaras poco a poco, como si la llama que ardía en ti con fuerza, de repente se ha ido apagando y lo peor de todo es que a veces nosotros mismos somos los últimos en notarlo, nos enfocamos tanto en todo lo que esta pasando alrededor que no nos damos cuenta lo que pasa dentro de nosotros mismos.


Creo que la mayoría hemos pasado por ese momento, todos llegamos a un punto en que las cosas comienzan a sentirse monótonas, ponemos nuestra mirada en otras cosas cuando debería estar en Jesús, escuchamos algún mal comentario o comenzamos a perder la comunicación con Dios, a alejarnos de Él, y perdemos tanto el tiempo que para cuando caemos en cuenta ya estamos por ahí en algún rincón tristes y desmotivados, sin esa fuerza de empuje que nos ayude a hacer algo, sin una motivación aparente.


Cuando nos sentimos desanimados acostumbramos a dejar de lado lo que con tantas ganas habíamos comenzado a hacer, a veces nuestros motivos para realizar una actividad o desempeño espiritual son muchos para comenzar, pero a medio camino los vamos perdiendo uno a uno hasta que tomamos la decisión de terminar con todo.


Más grande que las razones que provocaron tu desanimo, esta el motivo principal que te anima a seguir adelante y a no desistir, es el amor de Dios que te mueve, que te impulsa hacia adelante a mantenerte firme hacia la meta del camino que comenzaste, así pueda ser miedo, dolor, tristeza, o decepción por lo que estés pasando, lo dice Dios en su palabra “Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque Jehová tu Dios es el que va contigo; no te dejará, ni te desamparará. Deuteronomio 31:6


No importa cuantas veces quiera venir el desanimo a tu vida espiritual, una comunicación constante con Dios es la mejor manera de cerrarle la puerta en la cara y continuar en la labor.

 

 


Autora: Maite Leija