1 Corintios 14:24-25 La Biblia de las Américas (LBLA)

                                

 

 

 

Superioridad del don de profecía

 

 

 

14 Procurad alcanzar el amor; pero también desead ardientemente los donesespirituales, sobre todo que profeticéis. Porque el que habla en lenguas[a] no habla a los hombres, sino a Dios, pues nadie lo entiende[b], sino que en su espíritu[c] habla misterios.Pero el que profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación y consolación.El que habla en lenguas, a sí mismo se edifica, pero el que profetiza edifica a la iglesia.Yo quisiera que todos hablarais en lenguas, pero aún más, que profetizarais; pues el que profetiza es superior al que habla en lenguas, a menos de que las interprete para que la iglesia reciba edificación. Ahora bien, hermanos, si yo voy a vosotros hablando en lenguas, ¿de qué provecho os seré a menos de que os hable por medio de revelación, o de conocimiento, o de profecía, o de enseñanza? Aun las cosas inanimadas, como la flauta o el arpa, al producir un sonido, si no dan con distinción los sonidos, ¿cómo se sabrá lo que se toca en la flauta o en el arpa? Porque si la trompeta da un sonido incierto, ¿quién se preparará para la batalla? Así también vosotros, a menos de que con la boca[d] pronunciéis palabras inteligibles, ¿cómo se sabrá lo que decís[e]? Pues hablaréis al aire. 10 Hay, quizás, muchas variedades de idiomas[f] en el mundo, y ninguno carece de significado. 11 Pues si yo no sé el significado[g] de las palabras[h], seré para el que habla un extranjero[i], y el que habla será un extranjero[j] para mí[k]12 Así también vosotros, puesto que anheláis dones espirituales[l], procurad abundar en ellos para la edificación de la iglesia. 13 Por tanto, el que habla en lenguas, pida en oración para que pueda interpretar. 14 Porque si yo oro en lenguas, mi espíritu ora, pero mi entendimiento[m]queda sin fruto. 15 Entonces ¿qué? Oraré con el espíritu, pero también oraré con el entendimiento[n]; cantaré con el espíritu, pero también cantaré con el entendimiento[o].16 De otra manera, si bendices sólo en[p] el espíritu, ¿cómo dirá el Amén a tu acción de gracias el que ocupa el lugar del que no tiene ese don[q], puesto que no sabe lo que dices? 17 Porque tú das gracias bien, pero el otro no es edificado. 18 Doy gracias a Dios porque hablo en lenguas más que todos vosotros; 19 sin embargo, en la iglesia prefiero[r]hablar cinco palabras con mi entendimiento[s], para instruir también a otros, antes que diez mil palabras en lenguas.

20 Hermanos, no seáis niños en la manera de pensar; más bien, sed niños en la malicia, pero en la manera de pensar sed maduros. 21 En la ley está escrito: Por hombres de lenguas extrañas y por boca[t] de extraños hablare a este pueblo, y ni aun asi me escucharan, dice el Señor.22 Así que las lenguas son una señal, no para los que creen, sino para los incrédulos; pero la profecía es una señal, no para los incrédulos, sino para los creyentes. 23 Por tanto, si toda la iglesia se reúne y todos hablan en lenguas, y entran algunos sin ese don o son incrédulos, ¿no dirán que estáis locos? 24 Pero si todos profetizan, y entra un incrédulo, o uno sin ese don, por todos será[u] convencido, por todos será[v] juzgado; 25 los secretos de su corazón quedarán al descubierto, y él se postrará y adorará a Dios, declarando que en verdad Dios está entre vosotros.

 

 

 

 

Un Encuentro Con la Palabra

REFLEXION

 


Jovenes Cristianos – ¡REBELDES!

Pasaje clave: Números 16.

 

 

 

Surge un grave problema de rebeldía, una situación crítica para los líderes que tuvieron que enfrentarse a ella y la intervención de Dios para poner fin a ese descontrol.

Los rebeldes no eran nenitos caprichosos, ni adolescentes enojados. No eran personas nuevas que aún no conocen las cosas de Dios, ni hermanitos recién convertidos que todavía no saben nada de la Palabra. ¡No! Eran príncipes del pueblo. ¡Líderes!.

Formaban parte del consejo que se reunía con Moisés para tomar decisiones y algunos de ellos, además, eran levitas que servían en el Tabernáculo y tenían la responsabilidad de ministrar a la congregación.

Estos rebeldes tenían un serio problema no resuelto: No aceptaban a los líderes que tenían ni los soportaban. Para ellos, Moisés y Aarón eran los menos indicados para liderarlos y guiarlos. ¿O acaso ellos mismos no eran líderes también? ¿No ministraban al pueblo? ¿No servían en el Tabernáculo? ¿Acaso no hablaba Dios por medio de ellos?

Estas personas rebeldes querían más. No les alcanzaba con ser líderes, querían más autoridad, más poder, más reconocimiento, más control sobre todas las cosas y menos sujeción, menos dependencia de los líderes escogidos. Ellos, con sus comentarios, pusieron a todo el pueblo en contra de Moisés y de Aarón.

Ellos no se sujetaron ni respetaron la autoridad de Dios quien había escogido y levantado a Moisés y a Aarón en el liderazgo.

¿Qué piensas de las actitudes de Moisés?

Él era muy manso, pero se enojó muy fuerte contra la rebeldía de ellos. Les recordó que él no se había autoproclamado líder. Defendió su liderazgo porque sabía que Dios lo había escogido y levantado y los desafió a ponerse delante de Dios para que Él mismo confirmara quién había sido elegido.

El juicio de Dios fue muy severo contra ellos. Tenían que ser ejemplos y modelos para el resto del pueblo, pero los contaminaron con su misma rebeldía y orgullo. ¡Murieron 14.700!

Hay líderes que Dios no ha levantado, hacen lo que no deben y son pecaminosos. Obran por su propia cuenta. No son ejemplo ni modelo. Es necesario denunciar a estos líderes. Pero Dios protege al liderazgo que Él ha levantado y que obra de acuerdo a su voluntad.

Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio”

 

 

 

Por Edgardo Tosoni

 

 

 

 

Un Encuentro Con la Palabra

REFLEXION

 

 

¿Por qué no quieres un compromiso?

 

 

Una joven mujer se enamoró perdidamente de un hombre quién le juró que la amaba con todo el corazón. Lamentablemente, él nunca quiso presentarla a su familia, no la incluía en sus metas futuras y por tanto, nunca fijaba fecha para la boda. Hasta que un día ella se cansó, esperó por mucho tiempo que este joven tomara la decisión de madurar y establecer una familia, pero descubrió que él solamente quería una relación, no un compromiso.


Este pueblo de labios me honra; Mas su corazón está lejos de mí. Mateo 15:8
Seguramente que en su tiempo, aquella joven le reclamó a su pareja diciendo: ¿Por qué me dices que me amas, sino quieres comprometerte conmigo? Así como cualquiera de nosotros en su lugar lo haría ante alguien que dice amar pero no lo demuestra. Del mismo modo, debes saber que Dios hace una pregunta parecida, nuestro Señor nos hace un reclamo, y nos dice: 


¿Por qué me llaman ustedes “Señor, Señor”, y no hacen lo que les mando hacer? Lucas 4:46


Son muchas las personas que dicen ser "Seguidores de Cristo"; sin embargo, ser un verdadero cristiano es más que simplemente "creer", significa ser discípulo de Jesús, encontrarse en una constante lucha para cambiar y parecernos más a Cristo, conocer su palabra y obedecerla, incluso dar la vida por ella. ¡Llevar su mensaje para que más personas se salven! 


El Señor declaró:


"No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos" Mateo 7:21


En la actualidad son realmente muchos, los que sólo le dicen -"Señor, Señor"- pero pocos los que "Hacen la voluntad del Padre". Muchos dicen y no hacen, por tanto, no todos se irán al cielo. Por eso, pregúntate: ¿Por qué no quieres un compromiso? Examinemos nuestra vida, si realmente nos hemos comprometido con Dios o solamente somos como aquel hombre que mantiene una relación superficial.


¡Dile a Dios que lo amas con actos, no con palabras!

 

 

Shirley Chambi
CVCLAVOZ