http://unencuentroconlapalabra1.jimdo.com/

facebook un encuentro con la palabra

http://www.amigosporisrael.org/

 

 

 

 

2 Corintios 4:15 La Biblia de las Américas (LBLA)

Ministros de Cristo

 

 

 

 

Por tanto, puesto que tenemos este ministerio, según hemos recibido misericordia, no desfallecemos; sino que hemos renunciado a lo oculto y vergonzoso[a], no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino que, mediante la manifestación de la verdad, nos recomendamos a la conciencia de todo hombre en la presencia de Dios. Y si todavía nuestro evangelio está velado, para[b] los que se pierden está velado, en los cuales el dios de este mundo ha cegado el entendimiento[c] de los incrédulos, para que no vean el resplandor del evangelio de la gloria de Cristo, que es la imagen de Dios[d]. Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Cristo Jesús como Señor, y a nosotros como siervos vuestros por amor[e] de Jesús. Pues Dios, que dijo que de las tinieblas resplandeciera la luz, es el que ha resplandecido en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Cristo.

Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la extraordinaria grandeza del poder sea de Dios y no de nosotros. Afligidos en todo, pero no agobiados; perplejos, pero no desesperados; perseguidos, pero no abandonados; derribados, pero no destruidos; 10 llevando siempre en el cuerpo por todas partes la muerte[f] de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestro cuerpo. 11 Porque nosotros que vivimos, constantemente estamos siendo entregados a muerte por causa de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestro cuerpo[g] mortal. 12 Así que en nosotros obra la muerte, pero en vosotros, la vida. 13 Pero teniendo el mismo espíritu de fe, según lo que está escrito: Crei, por tanto hable, nosotros también creemos, por lo cual también hablamos; 14 sabiendo que aquel que resucitó al Señor Jesús, a nosotros también nos resucitará con Jesús, y nos presentará juntamente con vosotros. 15 Porque todo esto es por amor a vosotros[h], para que la gracia que se está extendiendo por medio de muchos, haga que las acciones de gracias abunden para la gloria de Dios.

 

 

 

 

 

LUN ENCUENTRO CON LA PALBRA

REFLEXION

5 Preguntas Antes De Predicar Un Mensaje
Publicado por: Pastor Carlos Vargas Valdez en Articulos Cristianos 0

 

 

Escritura: Efesios 5:6; 5:14
5:6 Nadie os engañe con palabras vanas, porque por estas cosas viene la ira de Dios sobre los hijos de desobediencia.
5:14 Por lo cual dice: Despiértate, tú que duermes, Y levántate de los muertos, Y te alumbrará Cristo.
Antes de predicar un mensaje es bueno hacer una autoevaluación del mismo, colocar nuestro mensaje delante de Dios siempre es el primer paso, es más, en la mayoría de las veces Dios nos habla al corazón para compartir lo que debe ser compartido en la Iglesia, y siempre debemos de ocuparnos en oración para saber que es lo que Dios quiere que yo diga a su pueblo.

Cada vez que predico o enseño en una reunión, sigo estas 5 preguntas antes de mí predicación las cuales me sirven como un filtro para colocarme en el lugar correcto. Estas no son mis propias preguntas; creo que las leí antes en algún lugar, pero con los años las he aprendido y les he dado mi propia forma.

Compártela en tu red social favorita.

Aquí te dejo 5 preguntas que me hago mientras preparo un mensaje:

1. ¿Tu Predicación Apunta Siempre a Jesús?
Cualquiera que sea el tema o el pasaje de la Escritura que estamos abordando, deben siempre apuntar y predicar a Jesús en todo momento.
Cuando te inclinas hacia la predicación narrativa, por ejemplo en los relatos del sermón, en los mensajes del Evangelio, etc, la persona de Jesús tienen que ser el “clímax” de cada historia, toda la narrativa de tus sermones deben siempre apuntar a Jesús.

Me esfuerzo por compartir acerca del Espíritu Santo y del Padre, de esta manera mantengo mi sermón equilibrado, pero la naturaleza del kerigma (‘proclamar como un emisario’) es predicar a Cristo y a éste crucificado (1 Cor. 2:2).

2. ¿Predicas A Cristianos?
Trato de abordar específicamente a cristianos que escuchan mi sermón, reconociendo que incluso puede haber una persona que ha estado en la iglesia y es seguidor de Jesús durante mucho tiempo, para ellos el Evangelio sigue siendo buenas noticias.

La buenas noticias nunca pasan de moda, y los cristianos necesitan recordatorios específicos y claros de la bondad de Dios.

3. ¿Predicas A No Cristianos?
También trato de hacer frente a las personas que puedan estar investigando la espiritualidad y el cristianismo y que todavía no son seguidores de Cristo, ellos están siempre con dudas o colocando escusas como esta: “si quitaran todo y a todos de la Iglesia y dejaran solo a Jesús, entonces yo…”

Esto está fuera de un deseo de ser inclusivo y reconocer que no todo el mundo en un servicio (culto) cristiano conoce a Jesús debe estar siempre claro en nuestra visión de comunicador. Yo tampoco tengo una agenda oculta. Hago mi programa muy claro, y espero que las personas vengan a conocer a Jesús, porque Él es la fuente de vida, amor, gozo y de toda gracia.

4. ¿Predicas Al Corazón o A La Actitud?
Aquí es donde Jesús llego en todo momento.
Si bien las acciones externas y los comportamientos de la vida también son valiosas, son sólo un reflejo de las motivaciones del corazón que llevamos en el interior. Si sólo estoy hablando de comportamientos, o sólo doy puntos de auto ayuda para que el comportamiento natural de la gente cambie, entonces me esta faltando el gran componente de la espiritualidad: el corazón, el interior, donde están los deseos del alma humana.
5. ¿Predica A La Gente Un Llamado a la Acción Inmediato?
En armonía con lo que hablo al corazón, quiero también dar un paso claro y definido a la acción para que la gente realice.

Si una persona escucha un sermón y puede salir por la puerta pensando: “Estuvo buenísimo … pero no tengo ni idea de lo qué debo hacer”, entonces no me he comunicado con la suficiente claridad.

Es necesario que existan vías claras sobre la forma de responder, ya sea relacional, emocional o con una acción en particular. Ora por alguien hoy. Inscríbete en esa clase o viaje misionario. Perdona a alguien con todo tu corazón. Lee un pasaje de las Escrituras todos los días esta semana. Invita a uno de tus vecinos a cenar o tomar un café.

Medidas prácticas específicas, claras e inmediatas deben tomarse para que no nos convirtamos solamente oidores de la Palabra y no hacedores. (Santiago 1:22).

¿Cual de estas preguntas van más contigo? Pastores y predicadores: ¿Qué preguntas te haces cuando te estas preparando para predicar?

 

 

 

 

UN ENCUENTRO CON LA PALBRA

 

REFLEXION

¿Quieres que te vaya bien en todo?

 

 

 

Después de la muerte de Moisés, Dios le dio la siguiente instrucción a Josué para guiar al pueblo de Israel a la tierra que les había prometido: “Sé fuerte y muy valiente. Ten cuidado de obedecer todas las instrucciones que Moisés te dio. No te desvíes de ellas ni a la derecha ni a la izquierda. Entonces te irá bien en todo lo que hagas. Estudia constantemente este libro de instrucción. Medita en él de día y de noche para asegurarte de obedecer todo lo que allí está escrito. Solamente entonces prosperarás y te irá bien en todo lo que hagas. Mi mandato es: “¡Sé fuerte y valiente! No tengas miedo ni te desanimes, porque el Señor tu Dios está contigo dondequiera que vayas”. Josué 1:7-9 (NTV)

De este versículo podemos extraer dos recomendaciones importantes:
-Que seamos fuertes y valientes a pesar de lo que tengamos que enfrentar y que no nos desanimemos en ningún momento porque Dios promete estar con nosotros donde permita que estemos.

-Que obedezcamos y pongamos en práctica todos los días lo que está escrito en su Palabra para que nos vaya bien en todo lo que hagamos porque ese es el anhelo de nuestro Padre Celestial, tal y como lo dice 3 Juan 2 “Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma”.

La prosperidad que Dios nos ofrece no sólo se refiere al área económica sino a tener su favor en todo lo que anhelamos como: salud, familia, trabajo, ministerio, etc., porque son añadiduras a nuestra obediencia por haberle dado a Él el primer lugar en nuestra vida.

En vez de hacer tesoros acá en la tierra donde las cosas perecen, hagamos tesoros en el cielo donde pasaremos la eternidad. Esforcémonos diariamente en compartir con otras personas el amor de Dios y el sacrificio que hizo nuestro Señor Jesús en la cruz, porque esa es la misión que nos dejó nuestro Salvador y nos pedirá cuentas a cada uno de nosotros cuando nos presentemos delante de Él.

¡La clave de nuestro éxito es amar y obedecer a Dios!

 

 

 

 

 

Brisna Bustamante
CVCLAVOZ