Malaquías 3:5 La Biblia de las Américas (LBLA)

 

 

 

 

El día del juicio

 

 

He aquí, yo envío a mi mensajero[a], y él preparará[b] el camino delante de mí. Y vendrá de repente a su templo el Señor a quien vosotros buscáis; y el mensajero[c] del pacto en quien vosotros os complacéis, he aquí, viene —dice elSeñor de los ejércitos. ¿Pero quién podrá soportar el día de su venida? ¿Y quién podrá mantenerse en pie cuando El aparezca? Porque El es como fuegode fundidor y como jabón de lavanderos. Y El se sentará como fundidor y purificador de plata, y purificará a los hijos de Leví y los acrisolará como a oro y como a plata, y serán los que presenten ofrendas[d] en justicia al Señor.Entonces será grata al Señor la ofrenda[e] de Judá y de Jerusalén, como en los días de antaño y como en los años pasados. Y me acercaré a vosotros para el juicio, y seré un testigo veloz contra los hechiceros, contra los adúlteros, contra los que juran en falso y contra los que oprimen al jornalero en su salario, a la viuda y al huérfano, contra los que niegan el derecho del extranjero[f] y los que no me temen[g] —dice el Señor de los ejércitos. Porque yo, el[h] Señor, no cambio; por eso vosotros, oh hijos de Jacob, no habéis sido consumidos[i].

 

 

 

 


Un Encuentro Con la Palabra

REFLEXION

 

 

Jovenes Cristianos – ¡TODO LO PUEDO!

Pasaje clave: Filipenses 4:13.

 

 

¡TODO LO PUEDO! ¡En Cristo!        

 

 

Por ti mismo no puedes nada, pero en Cristo lo puedes todo. Cristo es poderoso y está en mi, por lo tanto TODO LO PUEDO porque Él me fortalece.

Todo pensamiento o sentimiento negativo que Satanás haya puesto en mí (“no puedo”, “no sirvo”, “voy a fallar”, “no soy capaz”, etc.) lo rechazo en el nombre del Señor Jesús porque Él vive en mi y Él no es cobarde, no es incapaz, no es inútil, y por lo tanto, yo tampoco lo soy.

Puedo amar, porque no soy yo el que ama, sino Cristo que ama en mí.

Puedo perdonar.

Puedo testificar.

Puedo orar.

Puedo obedecer sin quejarme.

Puedo esperar con paciencia.

Puedo confesar mis pecados y renunciar a ellos.

Puedo estudiar y aprobar mis materias.

Puedo leer y conocer la Palabra de Dios.

Puedo servir.

Puedo ser mejor hijo/hija.

Puedo honrar y respetar a mis padres.

Puedo vivir feliz.

Puedo soportar con gozo el sufrimiento.

Puedo vencer las tentaciones y tener victoria sobre el diablo.

Puedo vivir en el Espíritu y derrotar principados y potestades.

Puedo elegir correctamente a mi futuro/a novio/a.

Puedo rechazar malas amistades.

Puedo progresar y crecer mas.

Puedo creerle a Dios. Creer su Palabra.

Puedo orar más.

Puedo dar gracias en todo y siempre.

Puedo lograr los sueños que tengo.

Puedo mantener mi pureza sexual y guardar mi virginidad hasta el matrimonio.

Puedeo decirle no a la pornografía y a toda perversión sexual.

Puedo ser vencedor, porque TODO lo puedo en Cristo.

 

 

 

Extracto del libro: “Verdades Que Sanan”. (Editorial Logos).

Por Edgardo Tosoni

 

 

 

Un Encuentro Con la Palabra

REFLEXION

 

 

 

 

Cuando el desánimo llega

 

 

 

Desánimo es perder los ánimos o las ganas de hacer cierta cosa, perder la esperanza de conseguir algo, desmotivación para continuar una tarea, desgano de vivir, duda.

Y la causa más común del desánimo es el agotamiento físico y emocional. Este síntoma casi nunca es pasajero si no es tratado y se puede atribuir a causas concretas y muy diversas como la falta de sueño, un día de trabajo intenso y estresante, un viaje agotador, una situación agobiante, un uso mental sin descanso o preocupación constante.

Cuando estás cansado, pierdes fuerza y confianza. Es así de simple. ¿Cuál es el remedio?. Si estas cansado es porque necesitas descansar y el mejor remedio para el agotamiento físico y emocional ¡Es el descanso!
Jesús dijo: “Vengan a mí todos los que están cansados y llevan cargas pesadas, y yo les daré descanso.” Mateo 11:28 (NTV)

No luches en tus propias fuerzas, Dios quiere que vayas a Él y descanses en su presencia. El Señor conoce tu trabajo, tu entrega y lo mucho que te has esforzado para lograr lo que anhelas. Ahora es tiempo de descansar y confiar en Dios. “Benditos son los que confían en el Señor y han hecho que el Señor sea su esperanza y confianza.” Jeremías 17:7 (NTV)

La cosa más espiritual y hermosa que puedes hacer es ir a descansar en la presencia de Dios. Es increíble ver nuestro estado anímico después de reposar en el Señor. Las fuerzas no son las mismas, tu fe es extraordinaria, tu manera de pensar cambia, el desánimo desaparece, el amor en ti crece y sobre todo no dudas de que Dios está en ti.

A pesar de tu situación y el desánimo en tu vida, Dios es bueno, te ama, está contigo, sabe lo que te pasa, se interesa por ti, tiene un plan para tu vida y cumplirá su propósito en ti si confías en Él.

¡Acércate a Dios y renueva tus fuerzas en su presencia!

 

 

 

Diego Jora
CVCLAVOZ