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2 Timoteo 2:6 La Biblia de las Américas (LBLA)

El buen soldado de Jesucristo

 

 

Tú, pues, hijo mío, fortalécete en la gracia que hay en Cristo Jesús. Y lo que has oído de mí en la presencia de muchos testigos, eso encarga[a]a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros. Sufre penalidades[b] conmigo, como buen soldado de Cristo Jesús. Ningún soldado en servicio activo se enreda en los negocios de la vida diaria, a fin de poder agradar al que lo reclutó como soldado. Y también el que[c]compite como atleta, no gana el premio[d] si no compite de acuerdo con las reglas[e]. El labrador que trabaja debe ser el primero en recibir su parte de los frutos[f]. Considera lo que digo, pues el Señor te dará entendimiento en todo. Acuérdate de Jesucristo, resucitado de entre los muertos, descendiente de David, conforme a mi evangelio; por[g] el cual sufro penalidades, hasta el encarcelamiento como un malhechor; pero la palabra de Dios no está presa. 10 Por tanto, todo lo soporto por amor a los escogidos, para que también ellos obtengan la salvación queestá en Cristo Jesús, y con ella gloria eterna. 11 Palabra fiel es ésta:

Que si morimos con El, también viviremos con El;
12 si perseveramos, también reinaremos con El;
si le negamos[h], El también nos negará;
13 si somos infieles[i], El permanece fiel, pues no puede negarse a sí mismo.

 

 

 

UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

· 

REFLEXION

8 Versículos Bíblicos Sobre El Mantener La Calma
Posted by: Pastor Carlos Vargas Valdez in Versículos Bíblicos - Textos Bíblicos, Versiculos de la Biblia 0

 

 

 

1) Isaías 43:2 “Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti”.
Este verso de la Biblia es una memoria de cuando “Sadrac, Mesac y Abed-nego, cayeron atados dentro del horno de fuego ardiendo” (Daniel 3:23) y luego el rey y sus guardias vieron “cuatro varones sueltos, que se pasean en medio del fuego sin sufrir ningún daño; y el aspecto del cuarto es semejante a hijo de los dioses”.(Daniel 3:25). Estaban asombrados como “se juntaron los sátrapas, los gobernadores, los capitanes y los consejeros del rey, para mirar a estos varones, cómo el fuego no había tenido poder alguno sobre sus cuerpos, ni aun el cabello de sus cabezas se había quemado; sus ropas estaban intactas, y ni siquiera olor de fuego tenían.”(Daniel 3:27). Esto puede haber sido una imagen de Cristo, pero el punto es, Dios puede no mantenernos fuera del horno de fuego, pero estará allí con nosotros. ¡Aleluya!

2) 2 Timoteo 1:7 “Porque Dios no nos dio un espíritu de temor sino de poder, amor y dominio propio.”
El Espíritu de Dios nos da una sensación de calma porque la ira de Dios ha sido quitada de nosotros por medio de Cristo. Nosotros estamos en paz con Dios porque la condena ha sido quitada (Romanos 5:1,8:1).Tenemos la paz de Dios porque estamos en paz con Dios. Esta paz viene por Jesús, ya que “el castigo de nuestra paz fue sobre Él, y por sus llagas hemos sido curados” (Isaías 53:5) ya que “él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados;”(Isaías 53:5).

3) Marcos 4:39 “Y se despertó, reprendió al viento y dijo al mar:” Paz! Enmudece! “Y cesó el viento, y hubo una gran calma.”
Cuando los discípulos y Jesús estaban en un barco en el medio del mar, “se levantó una gran tempestad de viento, y las olas irrumpían en la barca, de modo que el barco se iba inundando. Pero él estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal. Y ellos le despertaron y le dijeron: “Maestro, ¿no te importa que perezcamos” (Marcos 4:37-38). Jesús ordenó de inmediato a la tormenta “Paz! Enmudece! “Y al instante no había viento y un” gran calma” lo que significaría que el mar era como el cristal. Después de esto, los discípulos “se llenaron de gran temor y se decían unos a otros:” ¿Quién es éste, que aun el viento y el mar le obedecen? “(Marcos 4:41). Jesús sabía que la tormenta se acercaba, sin embargo, Él envió a los discípulos con él y él puede hacer lo mismo con nosotros! El punto es, Jesús fue con ellos a través de la tormenta y luego la tormenta se calmó porque Él es soberano sobre la tormenta (y sobre todas las cosas!).

4) Lucas 12: 4-5 “Mas os digo, amigos míos: No temáis a los que matan el cuerpo, y después nada más pueden hacer.Pero os enseñaré a quién debéis temer: Temed a aquel que después de haber quitado la vida, tiene poder de echar en el infierno; sí, os digo, a éste temed”.
El autor de Hebreos, casi siendo consciente de la enseñanza de Jesús en Lucas 12: 4-5 (y puede haber sido consciente de ello!), Escribe: “!Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo!” (Hebreos 10:31), pero nunca se dice en algún lugar de la Biblia temer por caer en las manos de los hombres. Jesús mostró que caer en los manos de los hombres provocó mucho bien (Juan 3:16), por lo que esta vida física no es digna de comparación con la eternidad que habrá de venir (Romanos 8:18). ¿Qué es lo peor que podría pasar?. Podrías morir por tu fe o simplemente por accidente o que alguien te mate. Sólo podrían acelerar el estar con el Señor, y tengo serias dudas de que la persona que está con el Señor querrá volver a este mundo si se le diera la oportunidad.

5) Salmo 107:29-30 “Cambia la tempestad en sosiego, Y se apaciguan sus ondas.Luego se alegran, porque se apaciguaron; Y así los guía al puerto que deseaban”.
Este versículo de la Biblia casi parece ser una profecía de Jesús calmando la tormenta en el mar (Marcos 4:35-41), pero es más sobre nuestro Dios que tiene la omnipotencia o todo el poder como para Él calmar las agua y corregir las olas y ya que “Él hizo la tormenta”, él puede hacer “la tormenta enmudecer.” Se puede confiar en Dios. ¿Quién más puede ordenar lo que quiere?. ¿Quien le puede decir lo contrario?

6) Efesios 4: 26-27 “Airaos pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo, y no dan oportunidad al diablo”.
Esto se relaciona con lo que escribió Santiago (1:19), “Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse;”. “Cada vez que Jesús se enojó, fue una justa indignación, y no pecó en esto, pero esta misma rabia” no obra la justicia de Dios” nosotros a menudo damos lugar al diablo (“oportunidad”). Estar enojado con las cosas que Dios está enojado está bien, pero asegúrese de que “No paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres. Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres.No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor.”(Romanos 12: 17-19).

7) Juan 14:1 “No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí”.
Jesús estaba a punto de ir a la cruz y dejar a los discípulos durante un tiempo y viendo que estaban profundamente preocupados sobre esta situación Jesús los tranquiliza: “No os dejaré huérfanos; Vendré a vosotros “(Juan 14:18). En otra parte, Él dice: “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”.(Juan 14:27). Esas palabras no solo deberían consolar a sus discípulos y darles paz para soportar las cosas, sino que Jesús nos dice las mismas cosas a nosotros si nos encontramos en un tiempo de duda y miedo, “No se turbe vuestro corazón. Creer en Dios; creed también en mí “(Juan 14:1). Cuando hay confianza, hay paz … donde hay paz hay calma.

8) Eclesiastés 10:4 “Si el espíritu del príncipe se exaltare contra ti, no dejes tu lugar; porque la mansedumbre hará cesar grandes ofensas”.
Este versículo coloca el peso de nuestra reacción en nosotros. Podemos optar por mantener la calma cuando todos lo que nos rodean están cediendo. La calma es poderosa cuando hay una gran tempestad en los océanos de la vida. Mantener la calma puede “cesar grandes ofensas”. El Señor en su vida puedes su jefe. Puedes tener serios problemas en el trabajo debido a algo que hiciste o te negaste hacer y esto sería un pecado. El consejo de Salomón es “no salgas del lugar” o Mantente firme pero mantén la calma. Este es un poderoso antídoto para poner a descansar muchos problemas. La calma es como un tranquilizante para la ira.
Conclusión

En lo que estás pasando ahora mismo, hay una calma que puedes conseguir la cual está en el conocimiento de Cristo. Sabemos que le veremos algún día (Ap 21:3;22:4), y sabemos que la muerte no puede separarnos de Dios (Romanos 8:38-39), por lo que al igual que Sadrac, Mesac y Abednego , podemos decir, “no tenemos ninguna necesidad de responderte sobre este asunto. Si esto es así, nuestro Dios a quien servimos puede librarnos del horno de fuego ardiendo; y nos librará de tu mano, oh rey “(Daniel 3: 16-17). Esta es la razón por la cual no debemos de temer a los que matan el cuerpo (Lucas 12: 4-5), sólo debemos temer a Dios, en donde esta la verdadera sabiduría y el que nos da la tranquilidad en medio de las tormentas.

 

 

 

 

UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

REFLEXION

Resumido para ti.

 

Nuestra memoria puede almacenar muchísima información, entre ellas, momentos, películas, canciones, libros, temas que nos interesan, etc. A veces preferimos incluso ver un resumen del tema que nos interesa para comprenderlo más rápidamente, pues tal vez no disponemos del tiempo o la paciencia para hacerlo por completo.
Si bien Dios requiere que grabemos en nuestro corazón y memoria toda su Palabra, aunque sea un poco difícil, Dios demanda más que todo que podamos entenderla y practicarla. Ahora bien los diez mandamientos, que son muy importantes, están resumidos en dos mandatos: Amar a Dios y amar al prójimo ”Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.” Mateo 22:37-39 (RVR-1960)

Si nos damos cuenta, en los 10 mandamientos, los primeros cuatro son referentes a Él y los seis siguientes a nuestra relación con el prójimo.

Quizás no hemos estado practicando ninguno de ellos; porque se nos hace difícil hacerlo y recordarlo en momentos donde estamos aparentemente solos, o estamos sufriendo alguna decepción o injusticia, y es esa la razón por la cual Dios desea que aprendamos estos mandatos.

Dios ya nos facilitó la forma de poder comprender su Palabra, en realidad se resume en tenerlo a Él como primero en nuestra vida y amarlo con todas nuestras fuerzas y por consiguiente haremos lo que a Él le agrada que es amar a nuestro prójimo, sea bueno o sea malo así como Él lo hace.

Llego la hora de grabar en la mente realmente lo que Dios demanda de sus hijos, y si ya lo hiciste es hora de practicarla de verdad.

 

 

Telma Céspedes 
CVCLAVOZ