2 Timoteo 2:22  La Biblia de las Américas (LBLA)

 

 

 

 

El buen obrero de Dios

 

 

 

14 Recuérdales esto, encargándoles solemnemente en la presencia de Dios, que no contiendan sobre palabras, lo cual para nada aprovecha y lleva a los oyentes a la ruina. 15 Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, comoobrero que no tiene de qué avergonzarse, que maneja con precisión la palabra de verdad. 16 Evita[j] las palabrerías vacías y profanas, porque los dados a ellas, conducirán más y más a la impiedad[k]17 y su palabra[l] se extenderá como gangrena[m]; entre los cuales están Himeneo y Fileto, 18 que se han desviado de la verdad diciendo que la resurrección ya tuvo lugar, trastornando así la fe de algunos. 19 No obstante, el sólido fundamento de Dios permanece firme, teniendo este sello: El Señor conoce a los que son suyos, y: Que se aparte de la iniquidad todo aquel que menciona el nombre del Señor. 20 Ahora bien, en una casa grande no solamente hay vasos de oro y de plata, sino también de madera y de barro, y unos para honra y otros para deshonra. 21 Por tanto, si alguno se limpia de estas cosas, será un vaso para honra, santificado, útil para el Señor, preparado para toda buena obra. 22 Huye, pues, de las pasiones juveniles y sigue[n] la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que invocan al Señor con[o] un corazón puro. 23 Pero rechaza los razonamientos necios[p] e ignorantes, sabiendo que producen[q] altercados[r]24 Y el siervo del Señor no debe ser rencilloso, sino amable para con todos, apto para enseñar, sufrido,25 corrigiendo tiernamente a los que se oponen, por si acaso Dios les da el arrepentimiento que conduce al pleno conocimiento de la verdad, 26 y volviendo en sí, escapen del lazo del diablo, habiendo estado cautivos de él para hacer su voluntad.

 

 

 

 

Un Encuentro Con la Palabra

REFLEXION

 

 

Jovenes Cristianos – ¡TENTACIONES!

Pasaje clave: Deuteronomio 17.

 

 

¿Qué actitudes y qué clase de ejemplo tendría que dar aquel que fuera elegido rey (o líder, o pastor, o discipulador, o evangelista)? (17:16 al 20).

¿Entiendes? Tendrían que cuidarse:

De las tentaciones del poder (“aumentar para sí caballos“).
De las tentaciones del sexo (“muchas mujeres”).
De las tentaciones del dinero (“amontonar plata y oro”).
De las tentaciones de la soberbia (“elevar su corazón sobre sus hermanos“).
Y cada día tendría que buscar primero a Dios para ser corregido y enseñado con la Palabra, para no alejarse de Él y para aprender a vivir en humildad.

Las mismas tentaciones de poder, sexo, dinero y soberbia son las que enfrentamos hoy, especialmente quienes ocupan posiciones de liderazgos masivamente conocidos. ¡Bah!, aunque no los conozca ni su madre también están expuestos a estas tentaciones. Pero a mayor reconocimiento público mayor la presión que mete Satanás buscando, y probando de distintas maneras, puntos débiles para tumbar a los escogidos de Dios.

¡Cuídate de estas cosas! Aunque seas adolescente (y no masivamente conocido) querer ejercer poder sobre otros, ser sexualmente estimulado, disponer de dinero a tu antojo o sentirte más que otros, serán las armas más poderosas usadas por Satanás para destruir tu relación personal con Jesús y frustrar los propósitos de Dios para tu vida. Piénsalo.

 

 

Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio”

Por Edgardo Tosoni

 

 

 

 

 

Un Encuentro Con la Palabra

REFLEXION

 

 

¿Donde está la fe de ustedes?

 

 

 

Muchos creen saber la definición exacta de la fe, la cuestión es ¿saben realmente lo que significa la fe?

¿Sabías que nuestro Señor Jesucristo llamó la atención muchas veces a sus discípulos a causa de su poca fe? Veremos un caso muy particular:

Aconteció un día, que entró en una barca con sus discípulos, y les dijo: Pasemos al otro lado del lago. Y partieron. Pero mientras navegaban, él se durmió. Y se desencadenó una tempestad de viento en el lago; y se anegaban y peligraban.
Y vinieron a él y le despertaron, diciendo: ¡Maestro, Maestro, que perecemos! Despertando él, reprendió al viento y a las olas; y cesaron, y se hizo bonanza.
Y les dijo: ¿Dónde está vuestra fe? Y atemorizados, se maravillaban, y se decían unos a otros: ¿Quién es éste, que aun a los vientos y a las aguas manda, y le obedecen? Lucas 8: 22-25.

Aquí está la clave de todo problema, observemos la pregunta de Nuestro Señor. Él sabe perfectamente bien que sus discípulos tienen fe, la pregunta que les hace es: ¿Dónde está? Ustedes han alcanzado la fe pero ¿Dónde está en este momento? Debería estar aquí ¿Qué pasó con ella? Ese es el reclamo que hace Jesús a sus discípulos. Vemos que nuestro Señor les da una gran lección de lo que realmente significa la fe.

La fe no es obviamente sólo una cuestión de sentimientos, no puede ser así porque en circunstancias como esas los sentimientos pueden ser muy variables. La fe se adueña de todo el hombre, incluso de su mente, de su intelecto y de su entendimiento. Jesús nos enseña que la fe es una “actividad” algo que tiene que ejercitarse, no entra en acción por sí misma, nosotros debemos hacerla funcionar.
Y les dijo: ¿Dónde está vuestra fe? Lucas 8:25

Es lo mismo que decir ¿Por qué no toman su fe y la aplican a esta situación? Como podemos ver, fue por no poner a funcionar su fe que los discípulos se sintieron infelices y cayeron en ese estado de consternación.

¿Entonces cómo se aplica la fe? Al encontrarse uno en una situación difícil, lo primero que debe hacer es rehusarse a ser controlado por tal situación, la fe es un “rechazo” al pánico, significa aplacar y aplastar a la incredulidad. Una vez dado el primer paso, debemos traer a memoria lo que creemos y sabemos acerca de Dios, esto fue lo que los discípulos no hicieron, no se preguntaron: ¿será que nos ahoguemos estando Él con nosotros? ¡Imposible! Sin embargo, se dejaron llevar por el pánico.

Si Jesús es quien convirtió el agua en vino, hizo grandes milagros, dice que nos ama, que nos cuida y dice que hasta cada cabello de nuestra cabeza está contado ¿dejará Él que nos hundamos en una situación difícil? ¡No! Así es como razona la fe, la fe se aferra a la verdad.

Querido amigo ¿dónde está tu fe? La fe dice: No puedo creer que Él que me ha traído de tan lejos vaya a dejarme caer ahora ¡imposible! ¡Eso no correspondería al carácter de Dios!

Si te encuentras en una situación difícil pídele a Dios que te ayude a aplicar tú Fe y desarrollarla, rehusando ser controlado por las circunstancias, trae a la memoria lo que crees y lo que sabes de Él.

 

 

 


Shirley Chambi
CVCLAVOZ