1 Corintios 16 : 1-2 La Biblia de las Américas (LBLA)

 

 

 

 

 

Ofrenda para los cristianos de Jerusalén

 

 

 

16 Ahora bien, en cuanto a la ofrenda para los santos, haced vosotros también como instruí a las iglesias de Galacia. Que el primer día de la semana, cada uno de vosotros aparte[a] y guarde según haya prosperado, para que cuando yo vaya no se recojan entonces ofrendas. Y cuando yo llegue, enviaré con cartas a quienes vosotros hayáis designado[b], para que lleven vuestra contribución a Jerusalén. Y si es conveniente que yo también vaya, irán conmigo. Iré a vosotros cuando haya pasado por Macedonia (pues voy a pasar por Macedonia), y tal vez me quede con vosotros, o aun pase allí el invierno, para que me encaminéis adonde haya de ir. Pues no deseo veros ahora sólo de paso, porque espero permanecer con vosotros por algún tiempo, si el Señor me lopermite. Pero me quedaré en Efeso hasta Pentecostés; porque se me ha abierto una puerta grande para[c] el servicio eficaz, y hay muchos adversarios.

 

 

 

 

Un Encuentro Con la Palabra

REFLEXION

 


Jovenes Cristianos – MENOS ESPIRITUAL QUE UN ASNO

Pasaje clave: Números 22 al 24.

 

 

Los israelitas partieron del monte de Hor, conquistaron territorio enemigo (tierras de los amorreos y de Basán) y acamparon en los campos de Moab al borde del río Jordán. Aquí se desencadena una historia con cuatro protagonistas centrales: El rey de Moab, Balaam, una asna y Dios.

Balac, Rey de Moab.

Balac es una figura de Satanás. Al igual que Balac, Satanás tiene miedo de perder su territorio (el mundo con su cultura, sus modas, sus gustos, su estilo de vida) y a su gente (los pecadores oprimidos, perturbados, desconsolados, amargados y condenados al infierno).

Cada vez que el pueblo santo de Dios (la iglesia) avanza y conquista nuevos territorios (personas salvadas, perdonadas, libres de culpas y miedos) ¡él se pone como loco!

Al igual que Balac, su propósito es maldecir a los hijos de Dios. Tratarnos mal, despreciarnos, hundirnos, mentirnos. Hacernos sentir desvalorizados, fracasados, inútiles, enfermos, abandonados. Culpables de todo o víctimas de todo. Satanás es perverso. No lo trates con simpatía. No creas sus sucias mentiras. Él te odia. Pero su final está cerca. Él es un perdedor.

Balaam.

Esta persona no es lo que aparenta. ¡Ojo! Las apariencias engañan. No es lo mismo ser espiritual, que parecer espiritual. Éste sólo lo parecía.

Balaam era codicioso y fue fácilmente seducido por la propuesta económica de Balac. ¿Cómo estoy tan seguro de esto? Porque si él no hubiese sido tentado por las propuestas de Balac, no les hubiera dicho a los enviados que se quedaran con él una noche más para ver qué le decía Dios. Él esperaba que Dios cambiara de idea y lo apoyara.

Balaam sentía, además, que los mandamientos de Dios eran un obstáculo para su éxito (22:13, 18). Es como si él dijera: “Yo iría con ustedes pero Dios no me deja”. “No tengo problemas en maldecir al pueblo pero Dios no me da permiso”.

¿No decimos nosotros cosas parecidas? “Yo iría a bailar contigo pero en la iglesia no me dejan”. “Yo estaría en ese ministerio pero los lideres no me ponen”.

Pero Balaam insiste (22:19). Tener intimidad con Dios, hablar con él o insistirle, no significa que Él cambie de ideas para quedar bien con nosotros y satisfacer nuestros caprichos.

Balaam dejó de escuchar la palabra de Dios (24:1) y aunque Dios lo utilizó para bendecir a su pueblo, Dios no aprobó su vida (22:22). Dios puede usarte en ministerios pero no estar de acuerdo con tu vida, no aprobar tu corazón.

El asna.

¡El asna fue más espiritual que el propio Balaam! ¡El asna pudo “ver” lo que Balaam no veía! Pudo “ver” que Dios no aprobaba la codicia del corazón de su dueño. Pudo “ver” el impedimento de Dios. Pero Balaam no veía nada. Por no hablar obedientemente con Dios termino hablando con un animal. El asna a la que tratamos de estúpida resultó ser más sabia que el profeta desobediente.

¡Te das cuenta cómo la desobediencia puede transformar a alguien en un asno incrédulo y estúpido! Piénsalo.

Dios.

Como siempre Él guardo a su pueblo. Él los bendijo. Él les tapó la boca a todos sus enemigos. Él es Dios. ¿Qué más podemos decir?

Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio”

 

 

 

Por Edgardo Tosoni

 

 

 

 

Un Encuentro Con la Palabra

REFLEXION

 

 

Sin Dios

 

 

Todos los días escuchamos y vemos noticias que nos estremecen y asombran; nadie puede negar que estamos viviendo los últimos tiempos, la maldad se está multiplicando y el amor se está enfriando, todo lo que está escrito en la biblia se está cumpliendo.

Cuando uno se pregunta: ¿Por qué un ser humano puede lastimar y matar a una mujer, a un niño o a un anciano indefenso con tanta crueldad? La única respuesta que encontramos es porque esa persona no tiene a Dios en su vida y no lo teme. Olvidó el principal mandamiento que Jesús nos dejó: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y con toda tu mente; y a tu prójimo como a ti mismo”. Lucas 10:27 (RVR 1960)

Sólo Cristo es la solución, nadie más que Él puede llenar el vacío que uno tiene en su vida y curar las heridas de su corazón. En la mayoría de los casos son hombres y mujeres que no recibieron amor ni atención en sus hogares, que fueron maltratados, rechazados y abandonados por sus seres queridos, motivos por los cuales se refugiaron en el alcohol, las drogas y actos ilícitos.

Dejemos de ser indiferentes al dolor ajeno y clamemos a Dios por todos aquellos que jamás escucharon acerca de Jesús, que no conocen cómo fue su vida, los milagros que realizó, ni el gran sacrificio que hizo en la cruz del calvario por amor a cada uno de nosotros. Es tiempo de interceder también por los que escucharon alguna vez de Él pero no decidieron seguirlo y por aquellos que sí lo recibieron como su Salvador pero que se alejaron de su camino por alguna razón.

¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique? Romanos 10:14 (RVR 1960)

Hoy puede haber fiesta en el cielo y ser el día de salvación para todos ellos. Tal vez tú tienes a un familiar, a un amigo o conozcas a alguien que se encuentra en estas circunstancias, pide a Dios que su misericordia lo alcance y lo atraiga nuevamente a Él con amor; que use circunstancias, que hayan personas dispuestas a ir hasta donde él se encuentra y puedan compartirle el mensaje de esperanza y salvación que le ofrece Jesús pero también que te use a ti para clamar por su salvación y restauración.

Para Dios ninguna persona es un caso perdido, Él más que nadie está interesado en que todos procedemos al arrepentimiento y seamos salvos.


Cristo es la única solución a la contaminación del alma.

 

 

Brisna Bustamante
CVCLAVOZ