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Hechos 28:15 La Biblia de las Américas

 

Continúa el viaje a Roma

11 Después de tres meses, nos hicimos a la vela en una nave alejandrina que había invernado en la isla, y que tenía por insignia a los Hermanos Gemelos[h]. 12 Cuando llegamos a Siracusa, nos quedamos allí por tres días. 13 Y zarpando[i] de allí, seguimos la costa hasta llegar a Regio. Y al día siguiente se levantó un viento del sur, y en dos días llegamos a Puteoli. 14 Allí[j] encontramos algunos hermanos, que nos invitaron a permanecer con ellos por siete días. Y así llegamos a Roma. 15 Cuando los hermanos tuvieron noticia de nuestra llegada[k], vinieron desde allá a recibirnos hasta el Foro de Apio[l] y Las Tres Tabernas[m]; y cuando Pablo los vio, dio gracias a Dios y cobró ánimo.

UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

 

 

REFLEXION

¿Luchando solo?

Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ

Cuando estamos apurados o distraídos, ¿te ha pasado que buscas algo alrededor tuyo y de repente te das cuenta que estaba en tus manos? Algo parecido pasa cuando buscamos por todos lados la ayuda que tenemos en el Espíritu Santo, quien está en nosotros, y por distraídos no lo consideramos en nuestras dificultades y nuestro diario vivir. Tú, ¿acudes a Él o luchas solo?

No tienes porqué luchar solo

En Juan 14: 16-18 Jesús les hace una promesa a sus discípulos, que el Espíritu Santo estaría en ellos:

Y yo le pediré al Padre, y él les dará otro Abogado Defensor, quien estará con ustedes para siempre. Me refiero al Espíritu Santo, quien guía a toda la verdad. El mundo no puede recibirlo porque no lo busca ni lo reconoce; pero ustedes sí lo conocen, porque ahora él vive con ustedes y después estará en ustedes. No los abandonaré como a huérfanos; vendré a ustedes.

Juan 14:16-18 (RVR 1960)

El Espíritu Santo mora en el corazón de quien ha reconocido a Jesús como su Salvador y lo ha invitado a su vida. Él capacita, consuela, convence de pecado, justicia y juicio, guía a la verdad, nos da poder para testificar de Jesús, nos santifica, entre muchas otras cosas más.

Él está en ti y sin su ayuda todo tu esfuerzo por seguir adelante puede ser en vano, pues necesitamos de su poder para vivir en la voluntad de Dios.

Déjate guiar

Cuando luchamos solos, nos cansamos y hasta podemos desistir de nuestra decisión por seguir el camino de Dios; en cambio, cuando prestamos atención a la guía del Espíritu Santo, el trayecto se hace menos cansador y frustrante, porque seguimos adelante con sus fuerzas hacia los propósitos de Dios para nuestras vidas.

Reconócelo en tu diario vivir, fortalece tu fe a través de la Palabra y tu confianza en el Espíritu Santo se afirmará.

Ya no luches solo y en tus propias fuerzas para vencer al pecado o para andar en la voluntad de Dios, quizás es lo que te está faltando, rendirte al Espíritu Santo y permitirle que te guíe en tus decisiones y en todo lo que hagas.

Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios.

Romanos 8:14 (RVR 1960)

Soraida Fuentes

CVCLAVOZ

 

 

UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

 

 

REFLEXION

Renuevo » Crecimiento Personal » Amor A La Vida

Dios nos dio la vida para que lo honremos y lo adoremos y de esa manera cumplamos su propósito.

“De tal manera amó Dios al mundo que ha dado a su hijo unigénito para que todo aquel que en él crea, no se pierda sino que tenga vida eterna” Juan 3:16

Cada día hay testimonios del poder transformador de Dios en la vida de miles de personas. Son abundantes los testimonios de personas que al igual que el ciego sanado por el Señor Jesús lo hizo en el evangelio de San Juan Capítulo 9.

“Llevaron ante los fariseos al que había sido ciego. Era sábado cuando Jesús hizo el barro y le abrió los ojos al ciego. Por eso los fariseos, a su vez, le preguntaron cómo había recibido la vista.—Me untó barro en los ojos, me lavé, y ahora veo —respondió.

Algunos de los fariseos comentaban: «Ese hombre no viene de parte de Dios, porque no respeta el sábado.» Otros objetaban: «¿Cómo puede un pecador hacer semejantes señales?» Y había desacuerdo entre ellos.

Por eso interrogaron de nuevo al ciego:—¿Y qué opinas tú de él? Fue a ti a quien te abrió los ojos.

—Yo digo que es profeta —contestó.

Pero los judíos no creían que el hombre hubiera sido ciego y que ahora viera, y hasta llamaron a sus padres y les preguntaron:—¿Es éste su hijo, el que dicen ustedes que nació ciego? ¿Cómo es que ahora puede ver?

—Sabemos que éste es nuestro hijo —contestaron los padres—, y sabemos también que nació ciego. Lo que no sabemos es cómo ahora puede ver, ni quién le abrió los ojos. Pregúntenselo a él, que ya es mayor de edad y puede responder por sí mismo.

Sus padres contestaron así por miedo a los judíos, pues ya éstos habían convenido que se expulsara de la sinagoga a todo el que reconociera que Jesús era el Cristo. Por eso dijeron sus padres: «Pregúntenselo a él, que ya es mayor de edad.»

Por segunda vez llamaron los judíos al que había sido ciego, y le dijeron:

—Júralo por Dios.A nosotros nos consta que ese hombre es pecador.

—Si es pecador, no lo sé —respondió el hombre—. Lo único que sé es que yo era ciego y ahora veo”.

El programa Radial Amor a la vida de Alemania entrevisto al Dr. Serafín Contreras Galeano en Expolit, MIami sobre como Dios cambió su vida.