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Mateo 23:6  La Biblia de las Américas (LBLA)

Jesús denuncia a los escribas y fariseos

23 Entonces Jesús habló a la muchedumbre y a sus discípulos, diciendo: Los escribas y los fariseos se han sentado en la cátedra de Moisés. De modo que haced y observad todo lo que os digan; pero no hagáis conforme a sus obras, porque ellos dicen y no hacen. Atan cargas pesadas y difíciles de llevar, y las ponen sobre las espaldas de los hombres, pero ellos ni con un dedo quieren moverlas. Sino que hacen todas sus obras para ser vistos por los hombres; pues ensanchan sus filacterias[a] y alargan los flecos de sus mantos; aman el lugar de honor en los banquetes y los primeros asientos en las sinagogas, y los saludos respetuosos en las plazas y ser llamados por los hombres Rabí [b]. Pero vosotros no dejéis que os llamen Rabí; porque uno es vuestro Maestro y todos vosotros sois hermanos. Y no llaméis a nadie padre vuestro en la tierra, porque uno es vuestro Padre, el que está en los cielos. 10 Ni dejéis que os llamen preceptores[c]; porque uno es vuestro Preceptor, Cristo. 11 Pero el mayor de vosotros será vuestro servidor. 12 Y cualquiera que se ensalce, será humillado, y cualquiera que se humille, será ensalzado.

 

UN ENCUENTRO CON LA PALABRA
 

REFLEXION

ACUDIENDO AL DOCTOR.

 

 

"Bienaventurado el hombre que siempre teme a Dios; Mas el que endurece su corazón caerá en el mal." Proverbios 28:14 (RVR 1960).

Generalmente, uno acude al médico cuando empieza a sentir algún malestar en el cuerpo con la finalidad de encontrar una solución. Pero algunas personas hacen caso omiso a esos dolores pudiendo llevarlos a que se agrave su condición y la solución se presente como más compleja.

De la misma manera puede suceder en nuestra vida espiritual; cuando no reconocemos las faltas cometidas y toleramos pecados que al principio parecían inofensivos. De tal forma, cauterizamos nuestra conciencia de manera tal que ya no sentimos ningún pesar por el pecado cometido o bien lo racionalizamos o justificamos. Sin embargo debemos reconocer que este proceder trae consecuencias muy dolorosas, por ello en la Palabra nos dice: “Pero por tu dureza y por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios,” Romanos 2:5 (RVR 1960). Si notas que no te entristece el pecado cometido, es muy probable que tu corazón se esté endureciendo, arrepiéntete y rechaza el pecado así como Dios lo aborrece y serás bienaventurado.


Neyda Cruz
CVCLAVOZ

 

 

UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

 

REFLEXION

Devocionales
Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ


Con prudencia.

"Aquel de tus siervos en quien fuere hallada la copa, que muera, y aun nosotros seremos siervos de mi señor." Génesis 44:9 (RVR1960).

En este versículo vemos la respuesta que dieron los hermanos de José cuando fueron interpelados sobre la pérdida de una copa de plata; esto sucedió cuando José aún no les había revelado su identidad.

Si revisamos el resto del relato, veremos que debido a dicha respuesta, el hermano más pequeño y querido por su padre, fue encontrado como culpable, ya que la copa se encontraba entre sus pertenencias.

Si bien en realidad ninguno era culpable, ya que la copa había sido puesta para inculparlos, la respuesta apresurada que dieron, los hizo prisioneros. De igual forma podemos terminar si nos apresuramos a hablar y no somos cautelosos con las palabras.

Por ello, es recomendable pensar bien antes de dar una respuesta comprometedora, puede ser que llevados por impulso, aunque este sea por tener la conciencia tranquila, caigamos presas de nuestras propias palabras o seamos víctimas de una trampa, como le sucedió a los hermanos de José.

Sopesemos bien nuestras palabras, considerando que ellas tienen poder no sólo para afectar a otras personas, sino también a nosotros mismos.

Pidamos sabiduría a Dios para ser prudentes con nuestras palabras y que también con ellas podamos bendecir a otros.

“El corazón del sabio hace prudente su boca, Y añade gracia a sus labios.” Proverbios 16:23 (RVR1960).

Cesia Serna
CVCLAVOZ