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Hechos 8:36-39 La Biblia de las Américas (LBLA)

Felipe y el etíope eunuco

26 Un ángel del Señor habló a Felipe, diciendo: Levántate y ve hacia el sur, al camino que desciende de Jerusalén a Gaza. (Este es un caminodesierto[i].) 27 El se levantó y fue; y he aquí, había un[j] eunuco etíope, alto oficial de Candace, reina de los etíopes, el cual estaba encargado de todos sus tesoros, y había venido a Jerusalén para adorar. 28 Regresaba sentado en su carruaje, y leía al profeta Isaías. 29 Y el Espíritu dijo a Felipe: Ve y júntate a ese carruaje. 30 Cuando Felipe se acercó corriendo, le oyó leer al profeta Isaías, y le dijo: ¿Entiendes lo que lees? 31 Y él respondió: ¿Cómo podré, a menos que alguien me guíe? E invitó a Felipe a que subiera y se sentara con él. 32 El pasaje de la Escritura que estaba leyendo era éste:

Como oveja fue llevado al matadero;
y como cordero, mudo delante del que lo trasquila,
no abre el su boca.
33 En su humillacion no se le hizo justicia[k];
¿quien contara[l] su generacion[m]?
Porque su vida es quitada de la tierra.

34 El eunuco respondió a Felipe y dijo: Te ruego que me digas, ¿de quién dice esto el profeta? ¿De sí mismo, o de algún otro? 35 Entonces Felipe abrió su boca, y comenzando desde esta Escritura, le anunció el evangelio de Jesús. 36 Yendo por el camino, llegaron a un lugar donde había agua; y el eunuco dijo*: Mira, agua. ¿Qué impide que yo sea bautizado? 37 [n]Y Felipe dijo: Si crees con todo tu corazón, puedes. Respondió él y dijo: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios. 38 Y mandó parar el carruaje; ambos descendieron al agua, Felipe y el eunuco, y lo bautizó. 39 Al salir ellos del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y no lo vio más el eunuco, que continuó su camino gozoso. 40 Mas Felipe se encontró[o] en Azoto[p], y por donde pasaba, anunciaba el evangelio en todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea.

 

 

 

UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

REFLEXION

¿Cómo Tener Un Amor Firme Según La Biblia?
Publicado por: Devocionales en Preguntas y Respuestas Cristianas, Respuestas Cristianas 0

 

 

“LEVÁNTATE Y ANDA” (Mateo 9:5)

La compasión mal orientada es peligrosa porque:

a) hace que la persona se llene de autocompasión pero no haga nada por cambiar la situación;

b) hace ahondar aun más el pozo en el que la persona está sumida, dificultando con ello su recuperación;

c) crea una desprotección aprendida, donde el sujeto aprende que está indefenso y que no puede hacer nada al respecto, lo que le lleva a sentirse más impotente. Muchas veces, lo que se necesita es amor firme.

Aunque Jesús sintió compasión por la gente que sufría, no se limitó sólo a tener compasión de ellos. Siempre que fue posible, les ayudó a que se ayudaran ellos mismos. Antes de intervenir a su favor, a menudo les pedía que hicieran algo. Y a veces sus instrucciones parecían radicales. Por ejemplo: …Levántate, toma tu camilla y vete (Mateo 9:6); Tu hija ha muerto Jesús dijo al alto dignatario de la sinagoga: No temas, cree solamente (Marcos 5:35-36); … Escupió en tierra, hizo lodo con la saliva y untó con el lodo los ojos del ciego, y le dijo: Ve a lavarte en el estanque de Siloé Entonces fue, se lavó y regresó viendo (Juan 9:1-7).

2) Compromisos rutinarios.

¿Cómo iba un hombre paralítico a levantarse, tomar su camilla y caminar? ¿Cómo podía estar calmado un hombre al que le acababan de informar de la muerte de su hija? ¿Cómo podía un ciego llegar a un estanque de agua sin ver? En lugar de quedarse sólo en la compasión por las personas, Jesús les instó a la acción. Les ayudó a apartar su mente de los problemas y les motivó a hacer algo al respecto. A veces pensamos que no somos compasivos si confrontamos a la gente que tiene problemas, cuando en realidad lo que se necesita es precisamente eso, un amor firme.

 

 

 

UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

REFLEXION

La respuesta es no, pero te amo.

 

 

“Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites”. Santiago 4:3

Días atrás festejábamos el día del padre, como cada año es un tiempo de familia, donde se aprovecha para dar honra, y agasajar a los que Dios ha puesto como cabeza de familia y sacerdote del hogar.

Cuando pensamos en paternidad, seguramente lo asociamos rápidamente con tres características: Protección, Corrección y Provisión.

Cuando el padre está en la casa, trae a los hijos una sensación de seguridad, de que todo está bien, cualquier problema que se presente, está papá para resolverlo. Por eso vemos que cuando el padre falta, ya sea porque ha fallecido o bien porque se encuentra ausente, hay una carencia en los hijos que los lleva a sentirse inseguros.

Provisión: Otra de las características del padre es la de proveer para el hogar, es necesario que el hombre cumpla esta función que es de vital importancia.

Corrección y Disciplina. También el padre es encargado de corregir y poner límites, o por lo menos se espera que lo haga, claro que esto también involucra a las madres. Es necesario tener un sano equilibrio en esto, porque es tan malo el exceso de limites como su falta, lo mismo podríamos decir para protección.

Ahora, si en lugar de hablar de un padre terrenal, hablamos de nuestro Padre celestial, que seguros podemos sentirnos sabiendo que en Él encontramos protección, provisión y corrección.
Hablando de esta última y aunque a veces no nos guste, que importante es cuando un padre dice no.

Uno, humanamente tiende a querer satisfacer al máximo las necesidades de los hijos, en lo que piden, quieren o necesitan, sin embargo a veces necesitamos poner límites y decir no, lo mismo pasa con nuestro Dios, me imagino en su corazón de padre, queriendo responder cada oración pero a veces y por nuestro bien necesita decirnos que no.

Al momento nos sentimos frustrados, pero tal vez nos lleve tiempo, comprender que él tenía un plan mejor que el que yo había pedido.
¿Qué hacemos frente a los no del Señor? ¿Nos frustramos? ¿Nos entristecemos y pensamos esto no funciona?, ¿Pensamos en dejar todo? Si aprendemos aceptar los no del Señor, quitándoles el aspecto negativo que generalmente le damos, realmente podremos comprender que Él nos sorprende incluso más abundantemente de lo que nosotros esperamos.

Un no a tiempo, puede evitar muchas malas decisiones, ahorrarnos años de angustias, si Dios cierra un camino, puedes estar seguro que abrirá uno mejor aún donde no hay nada. Confía en Él y pronto habrá un sí mucho más grande para tu vida.

 

 

 

 


Daniel Zangaro
CVCLAVOZ