http://unencuentroconlapalabra1.jimdo.com/

facebook un encuentro con la palabra

http://www.amigosporisrael.org/

 

 

 

Oseas 3 :1 La Biblia de las Américas (LBLA)

 

 

 

Matrimonio simbólico de Oseas

 

 

Y el Señor me dijo: Ve otra vez, ama a una mujer amada por otro[a] y adúltera, así como el Señor ama a los hijos de Israel a pesar de que ellos se vuelven a otros dioses y se deleitan con tortas de pasas. La compré, pues, para mí por quince siclos[b] de plata y un homer[c] y medio[d] de cebada. Y le dije: Te quedarás conmigo por muchos días. No te prostituirás, ni serás de otrohombre, y yo también seré para ti. Porque por muchos días los hijos de Israel quedarán sin rey y sin príncipe, sin sacrificio y sin pilar sagrado, y sin efod y sin ídolos domésticos[e]Después los hijos de Israel volverán y buscarán al Señorsu Dios y a David su rey; y acudirán temblorosos al Señor y a su bondad en los últimos días.

 

 

 

 

Un Encuentro Con la Palabra

REFLEXION

 

 

Jovenes Cristianos – ESTO LO ESCUCHE ANTES

Pasaje clave: Números 5:5-31.

 

 

Y otra vez… Confesar y Restituir.

¿Qué tenían que hacer aquellos que pecaban además de confesar su pecado? (5:5-8).

Si tu pecado fue contra otras personas no alcanza con “llorar un poquito” y decirle “perdóname por toooodo lo que te hice”. No. Además de pedirle perdón tienes que compensar el daño que le causaste.

Por ejemplo:

Si robaste, devuélvelo.
Si agrediste públicamente pide perdón públicamente.
Si rompiste algo, repáralo o cómpralo nuevo.
Si vendiste lo que no era tuyo, recupéralo.
Si te enojaste, gritaste y trataste muy mal, empieza a bendecir con tus palabras y actitudes.
¿Hablaste mal de alguien? Entonces, ahora, habla de las virtudes de esa persona.
Esto es restitución. Pero no te confundas. No significa “convertirte en esclavo del otro“, significa restituirlo. Así era la ley de la restitución.

¿Y con los celos, qué?

¿Cómo trataban el problema de los celos matrimoniales? (5:11 al 31)

¡Imagínate el desfile de panzas hinchadas y muslos caídos que veríamos en la iglesia si practicáramos la ley de los celos!

Hoy estamos libres de aquellas consecuencias físicas pero no de las consecuencias espirituales y emocionales que generan los celos: amargura, dolor, distanciamientos, desconfianzas, inseguridades, dudas, acusaciones, culpas… ¿quién puede ser bendecido y bendecir a otros con todo esto en su corazón?

¿Estás celoso? Los celos nacen de la inseguridad y de la auto desvalorización, del temor a ser abandonado, del egoísmo, de la desconfianza. Limpia tu corazón, confiesa tus pecados, aprende a verte y a valorarte en Cristo. Aprende a creer en los demás. Poco a poco, aprende a crecer y a madurar.

 

 

Extracto del libro: “Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes: Números/Deuteronomio”

Por Edgardo Tosoni

 

 

 

 

Un Encuentro Con la Palabra

REFLEXION

 

 

Enemigos de Humo

 

 

Muchos lo llaman paranoia, otros, delirio de persecución pero la verdad es que muchas personas viven atemorizadas por enemigos de humo. Tal vez sea hora de dejar de vivir amedrentados por cosas que ni siquiera ocurrirán.

Podemos recordar la historia en la que Jacob quien usurpó la identidad de su hermano para recibir la bendición de su Padre, después huyó de su casa y fue perseguido por su hermano durante mucho tiempo. Jacob incluso le enviaba regalos a Esaú para que éste no lo matara.

Jacob creía que su hermano estaba lleno de rencor, odio, con ansias de venganza. Vivía y dormía atemorizado por algo que él creía que sucedería encuanto lo encontrara Esaú, y más aún cuando le dijeron que éste estaba llegando acompañado de 400 hombres.

Esto puede compararse con nuestras relaciones con otras áreas como la familia, los amigos, negocios, trabajo, la salud, etc. Estamos atemorizados por lo que puede salir mal o pasar, esto es porque no están en nuestro control y creemos siempre lo peor.

Pero, ¿Qué sucedió cuando Esaú encontró a Jacob? Todo lo que él pensaba que pasaría, no sucedió. Al contrario la Biblia nos cuenta lo que aconteció: “¿Y qué eran todos esos rebaños y esas manadas que encontré en el camino? preguntó Esaú. Son un regalo, mi señor, para asegurar tu amistad contestó Jacob. Hermano mío, yo tengo más que suficiente dijo Esaú. Guarda para ti lo que tienes. No insistió Jacob, si he logrado tu favor, te ruego que aceptes este regalo de mi parte. ¡Y qué alivio es ver tu amigable sonrisa! ¡Es como ver el rostro de Dios!” Génesis 33:8-10 (NTV)

Podemos ver que ese temor era en vano, su hermano lo estaba buscando porque lo quería de regreso, no le guardaba rencor y lo había perdonado.
Dejemos de vivir llenos de temor, creyendo cosas que no son reales, vivamos confiando en que Dios está en control, que nuestro Padre tiene misericordia si sabemos reconocer nuestras fallas.

Aparta de ti todo miedo y todo pensamiento negativo que hace que no puedas descansar tranquilo o que puedas vivir plenamente como Dios quiere.

 

 

Telma Céspedes
CVCLAVOZ