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Esdras 7:17  La Biblia de las Américas (LBLA)

Llegada de Esdras a Jerusalén

Después de estas cosas, en el reinado de Artajerjes, rey de Persia, subió Esdras hijo de Seraías, hijo de Azarías, hijo de Hilcías, hijo de Salum, hijo de Sadoc, hijo de Ahitob, hijo de Amarías, hijo de Azarías, hijo de Meraiot, hijo de Zeraías, hijo de Uzi, hijo de Buqui, hijo de Abisúa, hijo de Finees, hijo de Eleazar, hijo de Aarón, sumo sacerdote.Este Esdras subió de Babilonia, y era escriba experto en la ley de Moisés, que el Señor, Dios de Israel, había dado; y el rey le concedió todo lo que pedía[a] porque la mano del Señor su Dios estaba sobre él.También algunos de los hijos de Israel y de los sacerdotes, levitas, cantores, porteros y sirvientes del templo subieron a Jerusalén en el año séptimo del rey Artajerjes. Y él llegó a Jerusalén en el quinto mes; era el año séptimo del rey. Porque el primer día del mes primero comenzó a subir[b] de Babilonia; y el primer día del mes quinto llegó a Jerusalén, pues la mano bondadosa de su Dios estaba sobre él. 10 Ya que Esdras había dedicado su corazón a estudiar[c] la ley del Señor, y a practicarla, y a enseñar sus estatutos y ordenanzas en Israel.

11 Esta es la copia del decreto que el rey Artajerjes dio al sacerdote Esdras, el escriba, instruido en[d] las palabras de los mandamientos del Señor y de sus estatutos para Israel: 12 [e]Artajerjes, rey de reyes, al sacerdote Esdras, escriba de la ley del Dios del cielo: Paz perfecta. Y ahora 13 yo he proclamado un decreto de que cualquiera del pueblo de Israel, de sus sacerdotes y de los levitas en mi reino que esté dispuesto a ir a Jerusalén, puede ir contigo. 14 Por cuanto eres enviado por el[f] rey y sus siete consejeros para investigar acerca de Judá y de Jerusalén conforme a la ley de tu Dios que está en tu mano, 15 y para llevar la plata y el oro que el rey y sus consejeros han ofrendado voluntariamente al Dios de Israel, cuya morada está en Jerusalén, 16 y toda la plata y el oro que halles en toda la provincia de Babilonia, con la ofrenda voluntaria que el pueblo y los sacerdotes hayan ofrecido voluntariamente para la casa de su Dios que está en Jerusalén. 17 Con este dinero, pues, comprarás diligentemente novillos, carneros y corderos, con sus ofrendas de cereal y sus libaciones correspondientes, y los ofrecerás sobre el altar de la casa de vuestro Dios que está en Jerusalén. 18 Y lo que a ti y a tus hermanos os parezca bien hacer con la plata y el oro que quede, hacedlo conforme a la voluntad de vuestro Dios. 19 También los utensilios que te son entregados para el servicio de la casa de tu Dios, entrégalos todos delante del Dios de Jerusalén. 20 Y lo demás que se necesite para la casa de tu Dios, para lo cual tengas ocasión de proveer, provéelo del tesoro real. 21 Yo, el rey Artajerjes, proclamo un decreto a todos los tesoreros que están en las provinciasmás allá del río[g], que todo lo que os pida el sacerdote Esdras, escriba de la ley del Dios del cielo, sea hecho puntualmente, 22 hasta cien talentos[h] de plata, cien coros[i] de trigo, cien batos[j] de vino, cien batos de aceite y sal sin medida. 23 Todo cuanto ordene el[k] Dios del cielo, sea hecho con esmero para la casa del Dios del cielo, no sea que venga la ira contra el reino del rey y sus hijos. 24 También os hacemos saber que no se permite cobrar[l] tributo, impuesto o peaje a ninguno de los sacerdotes, levitas, cantores, porteros, sirvientes, o ministros de esta casa de Dios. 25 Y tú, Esdras, conforme a la sabiduría de tu Dios que posees[m], nombra magistrados y jueces para juzgar a todo el puebloque está en la provincia más allá del río, a todos los que conocen las leyes de tu Dios; y a cualquiera que las ignore, le enseñarás. 26 Y todo aquel que no cumpla la ley de tu Dios y la ley del rey, que la justicia se le aplique severamente, sea para muerte o destierro o confiscación de bienes o encarcelamiento.

27 Bendito sea el Señor, Dios de nuestros padres, que ha puesto esto en el corazón del rey, para embellecer la casa del Señor que está en Jerusalén, 28 y que me ha extendido misericordia delante del rey y de sus consejeros y delante de todos los príncipes poderosos del rey. Así fui fortalecido según estaba la mano del Señor mi Dios sobre mí, y reuní a los jefes de Israel para que subieran conmigo.

 

 

UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

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REFLEXION

Devocional Cristiano – No Estaré Ansioso.

 


Publicado por: Pastor Carlos Vargas Valdez en Devocional Cristiano, Devocional Diario, Devocional para Jovenes, Devocionales, Devocionales Biblicos, Devocionales para Mujeres 7 Comentarios


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Devocional Diario Cristiano para este Martes – No estaré Ansioso

“Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias” Fil 4:6.

A veces llegan cartas..otras veces son llamadas telefónicas.

Algunas veces entrevistas o simplemente encuentros casuales o conversaciones familiares que dejan en mi corazón un hondo vació que parece conducirme al afán, la angustia o la preocupación.

Quisiera dormir o pensar en otra cosa, pero no es posible. Persiste. Persiste insistentemente hasta robarme la paz y la quietud. Sin embargo, cuando leo palabras como las de Pablo a los Filipenses.

Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias, la paz parece regresar, porque cuando llevo todo en oración al Señor, una fuerza interna me capacita para seguir.

Hoy necesito aprender a persistir en oración.

Hay muchas cosas que yo no recibo porque no pido, como lo dice Santiago. Pero sobre todo porque no soy persistente. Hoy quiero aprender a llenar la copa de la oración. Aprender a llenarla la copa intensamente y abundantemente.

En la oración la cantidad como la calidad es importante. Yo no puedo decir que poco pero bueno es lo más importante. Creo que necesito mantener el equilibrio entre la cantidad y la calidad. Que necesito hacer hoy cuando la ansiedad viene a hundirme?

El apóstol Pablo me da la orientación.

Cuando la ansiedad viene, necesito preguntarme que me esta produciendo ansiedad y por lo regular la ansiedad viene cuando quiero tomar control de algo que escapa de mi control, porque lo que puedo controlar no me produce ansiedad.

Si hay algo que no puedo controlar eso me trae ansiedad, Pablo me dice que en ese caso sean conocidas mis peticiones delante del Señor. Lo que yo no puedo controlar, Dios lo puede controlar.

Esas peticiones serán llevadas con toda oración y ruego, pero esa oración debe ir acompañada de acción de gracias. El verso siguiente dice, que si hago eso..Entonces: La paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardara mi corazón y mi pensamiento en Cristo Jesus”.

La paz de Dios va mas allá de mi entendimiento. Que buena esperanza, para Días tan ansiosos.

Señor. Yo se que uno de mis peores enemigos es la impaciencia.

La impaciencia rápidamente me lleva al desanimo. Señor enseñame una vez mas a entender que las respuestas instantáneas o siempre son los caminos del cielo para hacer las cosas.

Tu me aconsejas siempre en tu Palabra a pararme y esperar quietamente ante el Señor. Yo se que aquellos que esperan en ti y te esperan a ti, sin aquellos que siempre ajustan sus agendas a la tuya y por lo tanto ellos heredaran la tierra.

Quiero ser uno de aquellos que en medio de la ansiedad, decide esperar pacientemente en su altar. Amen.

 

 

UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

 

REFLEXION

Devocionales
Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ


Haz lo tuyo y Dios hará el resto .

 


Hablé con un joven que se encontraba muy entusiasmado por iniciar un negocio de reparación de computadoras, y le pregunté: ¿Qué estás haciendo para que esa idea se haga realidad? Se quedó en silencio, pasó un buen tiempo y le volví a hacer la misma pregunta y su respuesta fue: ¿Estoy esperando que Dios me dé la oportunidad? Y así pasaron los años y este joven seguía conservando su sueño de negocio pero jamás hizo algo para lograrlo.

El ser humano tiene la capacidad de soñar cosas grandiosas y maravillosas para su vida y familia, pero el detalle no está solamente en soñar sino en trabajar y esforzarse para que esos anhelos se hagan realidad.

Dios prometió ayudarte a que tus planes se realicen “Pon todo lo que hagas en manos del Señor, y tus planes tendrán éxito.” Proverbios 16:3 (NTV) pero también te dice que pongas tu esfuerzo y hagas todo lo que está dentro de tus posibilidades para realizar tu sueño, “Poco trabajo, pobreza; mucho trabajo, riqueza. “ Proverbios 10:4 (NTV).

Al igual que el joven de la historia, hoy muchos tenemos planes y proyectos que ya los hemos puesto a conocimiento de nuestro Dios Poderoso que puede hacerlos realidad, pero si no hacemos algo, jamás lograremos alcanzarlos, es decir que anhelar y planificar no es suficiente, hay que poner manos a la obra.

Cuando Moisés y el pueblo de Israel recibieron la promesa de ser libres de los egipcios, ellos solamente debían caminar hacia el mar para llegar a la tierra prometida, ¿Imaginas si hubiesen dicho: “primero que Dios haga algo con el mar”? Jamás hubiesen salido de Egipto. Ellos hicieron su parte que era caminar y llegar a las orillas del mar y Dios hizo lo suyo: “(…) el Señor abrió un camino a través de las aguas mediante un fuerte viento oriental. El viento sopló durante toda la noche y transformó el lecho del mar en tierra seca.” Éxodo 14:21 (NTV).

Poner manos a la obra es un acto de fe, es una muestra de que estamos esperando en Dios y por ello estamos trabajando. No hay nada malo en orar para encontrar un trabajo, para iniciar un negocio o para saldar deudas; lo malo es quedarse sentados con los brazos cruzados lamentando la situación y esperando que de manera súper milagrosa te llegue un trabajo, que tus deudas se paguen por sí solas, etc.

Dios espera que pongas de tu parte, que demuestres tu fe y tu confianza en Él haciendo lo que está dentro de tus posibilidades, confiando en que Él se ocupará de lo imposible.


Judith Quisbert

CVCLAVOZ